No podemos aceptar ni naturalizar que haya otra Morena

Por Marcelo Rossi

Pensaba si escribir o no hacerlo porque las mezquindades y oportunismos pueden hacer que se use de "uno u otro lado" como si en esto hubiese lados.

Mataron a una nena de once años. Sin importar el sexo o la edad, nadie debería perder la vida en esas circunstancias. Siento, tal vez, que se cruzaron todos los límites. Algunos límites, subjetivos, pero límites al fin.

Podemos discutir la inseguridad como un problema y la muerte como una consecuencia, o pensar que la inseguridad y la muerte son las consecuencias de otros problemas. Y ahí la lista de causas puede ser amplia: económica, educacional, cultural, pero en la magnitud que se transita hoy creo que la principal se llama corrupción. Una corrupción organizada y minoritaria que, a través de personas específicas enquistadas como tumores en diferentes partes del sistema, han generado una metástasis que ahora debemos frenar. O hace rato debiéramos haberlo hecho.

No creo en las generalizaciones de "la" o "los" tal o cual cosa. El corrupto es corrupto, sea funcionario o sea civil. Una mesa tiene varias patas para mantenerse en pie y todas esas patas son responsables. El de "guante blanco" y el de "guante negro".

Un estado o familia que no propició oportunidades puede generar "ladrones de gallinas" pero acá hay otra cosa. El que va a robar sistemáticamente, el que dispara, el que pone a la venta lo robado, el que lo compra más barato, los que se llevan sus comisiones. Creo que son pocos, pero hacen mucho daño.

Si llevamos esta discusión a ver de qué lado de una avenida ocurrió, caeremos en la trampa y el cortoplacismo de pensar que es un problema de uno y no de todos. Creo que debe haber un gran acuerdo para priorizar este tema y acordar entre todos los actores de poder real de cómo resolver, indistintamente de la ideología o de los posicionamientos políticos. 

Un escrito me es insuficiente para expresar mis limitados pensamientos (que quede claro que son míos y no representan a nada ni nadie más que a mí), pero no podemos naturalizar ni aceptar que haya otra Morena.